miércoles, 12 de noviembre de 2008

PULPITOS

Hace unos días, compré una bolsa de pulpos pequeñitos, de esos que la gente suele llamar pulpitos ; palabra de mi desagrado porque con un solo acento o tilde en la letra u, se convierte en púlpito, lugar desde donde los jesuitas que dirigían los ejercicios espirituales de mi colegio, nos abroncaban a los pobres imberbes que temblábamos de miedo con la imagen de un Dios justiciero y vengador (más bien vengativo)que no estaba dispuesto a pasarte ni una. En fin.

A lo que iba que me enrollo.

Así pues, compré unos pulpitos, para ver si mejoraba el guiso que anteriormente, había suministrado a unas pequeñas sepias (también enanas) que cociné con escasa fortuna.

Sin embargo, poco a poco me voy acercando a la receta y pienso que la próxima tentativa con esta clase de bichos tendrá cierto éxito. Sea:

CEFALOPODITOS AL AJITO, Y PEREJILITO EN SU TINTITA

Para 250 gr de bichos.

Un diente de ajo serio. Si son normales -como almendras-, dos dientes.
Una cucharada sopera de perejil picado.
Un vasito de aceite. Entiéndase que vasito es el tamaño de los de vino.
Un vasito de vino blanco para el guiso. Otro para el cocinero.
Una bolsita de tinta de las que venden en congelados.
Sal al disgusto porque nunca acertarás con todos.

Experimento.

Cuézanse en agua abundante los bichos. Unos seis u ocho minutos, porque el objetivo del proceso es enternecerlos. No es válido contarles historias tristes, porque…!No¡. ¿qué quieres que te diga?

Pónganse en un escurridor a escurrir, claro. El caldillo se puede reservar para base de una paella. Al menos 1hora para que suelten toda el agua marina y la de la cocción. Si se prefieren más secos déjense 100 ó 200 días escurriendo.

Se pica el ajo (o los ajos) en daditos pequeños. Si no se ha hecho con el perejil, hágase ahora.

Desleír la bolsita de tinta en el vasito de vino blanco. No en el del cocinero, (si es que sobrevive).sino en el del guiso.

Se pone el aceite en una sartén a fuego mediano, para sofreír los ajos y el perejil. Cuando están ligeramente dorados, se añaden los bichos y se salan. Saltearlos unos dos minutos.

Añadir el vino con la tinta y seguir salteando, hasta que el vino pierda fuerza.

Servir caliente y que Dios reparta suerte. Ya me diréis.

No hay comentarios: